El otro día, un servidor advirtió que: igual había una película que citaba a tres tipos de pistoleros, el bueno, el feo y el malo. Yo, de cara a esta página, he decidido citar a tres tipos de personajes: Buenos, Malos y Tontos. Por desgracia dudo que salga mucho el primero, aunque los otros ya son habituales, de momento es habitual el tonto, la verdad es que hoy por hoy lo dejamos en la tonta, pero ha llegado la hora de pasar al malo: Hoy toca malo, Y a ello vamos.
En estos últimos días hemos vivido un caso tan especial que todavía no me he recuperado, primero de la sorpresa y luego de la falta de humanidad principios éticos y morales que presentan determinados individuos. Los políticos de este país han entrado en una auténtica deriva innombrable, pero no ahora, sino hace ya muchos años, aunque ahora no sea más que el resultado de la acción que un 28 de diciembre de 2004 y a petición del Entonces Presidente del Consejo de Ministros Jose Luis Rodríguez Zapatero, se puso en marcha la Ley Integral de Violencia de Género, Ley votada a favor por la totalidad de los diputados presentes, fuesen del Partido Político que fuese sin excepción. Únicamente de los actuales no existía VOX, por lo cual, todos los demás son responsables de lo votado entonces. La indudable inconstitucionalidad de la Ley, y como nadie sabe qué puede pasar mañana, hizo que 34 diputados no estuvieran presentes. Curiosamente los que desde entonces han ocupado los más altos puestos de este País, algunos ni siquiera están ya en política, pero todos sabemos quienes son. En estos días, alguien que no era de los presentes, ni de los ausentes, pero que dio luz verde en el Senado a dicha Ley, ha salido de ese anonimato que el Senado da, por su inexistencia real y se ha retratado de manera suficiente: Juan Espadas Cejas, alcalde de Sevilla.
Hace unos días en Cádiz un hombre murió a manos de su mujer. Casi simultáneamente en Sevilla, una mujer murió a manos de su marido, que luego se suicidó. Dos momentos dolorosos. La vida y la muerte cruzándose. Unas vidas perdidas de forma irrecuperable y varias familias rotas por el dolor y casi seguro para siempre. También lo más importante, la victimización negativa y positiva por motivos ideológicos. El Ayuntamiento de Sevilla, que dirige Juan Espadas Cejas decidió hacer un minuto de silencio por la mujer presuntamente asesinada en Sevilla (porque hasta que un juez no cierre el correspondiente expediente, así es).
Y dicho minuto homenaje lo preparó y puso en marcha con la aquiescencia de su partido, el PSOE, Los Podemitas y un partido que va a desaparecer en breve, Ciudadanos. Presentó una pancarta que rezaba; NO MURIÓ, FUE ASESINADA. Ningún nombre, seguramente porque quien la mandó confeccionar no sabía como se llamaba aquella mujer, tampoco quien confeccionó la misma y mucho menos quien la portaba. La realidad es que si repasamos hemeroteca y videoteca, no tienen nombre porque desde 2018, que nosotros hayamos comprobado, “es siempre la misma pancarta”, será por ahorrar gastos.
El otro partido existente en Andalucía y con representación, VOX, estuvo también allí, portaban otra pancarta sus representantes y gente del común, esta era nueva, básicamente porque aparecían los nombres de las dos recientes víctimas. Y que se situó con noventa grados de diferencia y apenas a unos metros de la anterior. Esta rezaba: Ramón y Carmen. Todas las víctimas merecéis el mismo respeto.
En este caso no eran víctimas anónimas, eran víctimas con nombre, con cara y con una vida rota. Lo cierto es que como siempre los que votaron a favor de que se aprobara una ley que incumple tres preceptos constitucionales. Y no lo digo yo, lo dice un exvicepresidente del gobierno y un Presidente de la Comunidad, ambos exdiputados y ambos cuentan la irregularidad de la aprobación de esta Ley, que les sirve de excusa a Podemitas y a Juan Espadas Cejas para hacer la propaganda que hace que hombres y mujeres se enfrenten. Porque para el alcalde de Sevilla y quién estaba detrás de aquella pancarta, el principio de igualdad que dice en la Constitución no existe. Pero si. ¡Si existe!, Por mucho que a ellos les pese.
¿Por qué sucede esto? Pues es fácil de explicar. Primero agonismo de los que quieren medrar, segundo medrar y tercero y más importante subvenciones, gastos, primas económicas, sueldos, dietas, etc. En pro de una igualdad teórica, que únicamente fomenta la desigualdad.
Como el movimiento se demuestra andando, aquí os dejamos el video en que ese Vicepresidente, Alfonso Guerra, y el Presidente socialista madrileño, Joaquín Leguina Hérran, ambos, dan sus razones sobre la inconstitucionalidad de la Ley de Violencia de Género, que sí apoyó en su día Juan Espadas Cejas, para que nadie diga que yo me invento cosas.
Por otro lado os recuerdo que este es el primero de uno de los nuevos capítulos de estas tres series, el premiado ya sabéis quien es y aunque piense, como todos los políticos españoles, que es “impune”, quizás esté en un error, todos nos equivocamos y la impunidad no es infinita.
Según la RAE, Real Academia de la Lengua Española. Impunidad
1. Nombre femenino.
Circunstancia de no recibir castigo un delito o un delincuente.
“Si no existiera una ley preventiva muchos hechos que no pueden ser probados quedarían en la impunidad”
Y ahí lo dejo…
José Antonio Ruiz de la Hermosa
