Mi frase del día, tras escuchar unas recientes declaraciones del Papa Francisco:
“Antes de que Afganistán (o cualquier otro país islámico fundamentalista) pueda convertirse en una democracia, el Papa se convertirá al Islam”.
Y hablando de declaraciones, vengo quemado desde el cuarto de estar de mi casa. Acabo de ver la bazofia esa que ponen las teles subvencionadas y que ellos llaman mesas de redacción, o cosas similares. Llevan a ellas a dos o cuatro contertulios. Como es natural una podemita, un sesudo o casi socialista y en el otro lado uno de ciudadanos y uno que: si, que no, que si, que no se, que a veces defiende al PP, ó sea pluralidad democrática.
En la de “telecirco” de hoy, curiosamente si buscas la entrevista de la que te voy a hablar no aparece en las que puedes volver a ver, estaba Fallarás, y los de siempre. Y hablan de Afganistán, Kabul, los Talibán, etc… De pronto conectan con Gervasio Sánchez Fernández , una auténtica institución entre los corresponsales de guerra. Lo primero deciros que yo vi la entrevista en directo, luego he tratado de verla en podcast y aparecen todas las entrevistas que ha habido esta mañana y de todos los días, pero esta, va a ser que no.
Y ¿por qué?. Pues porque Gervasio les ha cantado las verdades del barquero, luego al final se disculpado, pero básicamente ha dicho algo que ayer le oí en “esradio” a Francisco Marhuenda.
…//… ¿Como se puede opinar de Afganistán, si no has puesto los pies allí?…//… Vamos que, además de la frasecita, les ha dicho que: mucho periodista de salón, mucha opinión sesgada, mucho politiqueo, pero de lo que allí se cuece, nada de nada.
Yo recuerdo a Gervasio de un viaje que hicimos juntos en avión Hércules del Ala 31, hará como 18 años más o menos, y digo más o menos porque ya son años, pero si recuerdo a un tipo de unos cinco años menos que yo, sin pelos en la lengua y que ya estaba hasta los coj… de tanto cachondeo, tanta mentira y tanto rollo macabeo. Tan es así, que muy discretamente el inútil del CNI, que venía en el avión, me dijo que no hablara con aquel individuo, porque podía contarle algo sin querer o queriendo, y ya se sabe la excelente transparencia que la Administración Española tiene con los periodistas que no le besan el culo.
Claro está, yo todavía no me dedicaba a esto, era militar en activo y no me quedo mas remedio que contemporizar y hablar de toros y de fútbol, eso sí sin mezclar al Barcelona y al Madrid, porque eso también está prohibido. Lo cierto, es que si en 2003 este hombre estaba quemado, esta mañana ha demostrado, que como el vino, ha mejorado con el tiempo.
Lleva poco más de cuarenta años en el negocio de ser corresponsal de guerra y tiene un montón de premios por sus trabajos periodísticos. El más importante, “su credibilidad”, lo demás son papeles para colgar, convenientemente enmarcados, en la pared.
No le han dejado decir mucho, con la excusa que ponemos todos cuando tenemos que cortar algo que no interesa, y ahí entono el “mea culpa” que me toca, aquello de: …//… Bueno nos estamos quedando sin tiempo…//… Y hala ya te puedes marchar. Pero le ha dado tiempo a rematar los puntos principales. Lo que me ha dado para concluir una serie de ideas. Las ideas son mías, no de Gervasio, pero sus intervenciones me han ayudado a concluirlas. A saber:
Nula preocupación de los políticos por los problemas reales, básicamente van a golpe de encuesta de cara a las próximas elecciones. A ninguno de ellos le importa la población afgana, en realidad tampoco les importa la de su propio país, solo les importa el rédito electoral y otros cuatro años chupando del bote.
En el tema afgano se ha invertido un montón de dinero, aconsejados por asesores, que no han ido allí a nada, o si han ido, como si no. Esto lo afirmo yo, acompañe a cierta ex-senadora y ex-diputada del PSC, que el 23F salió antes porque estaba embarazada. Para esta señora se fletó un avión desde Torrejón a Kabul, con un séquito de dos generales y varios civiles mas de: “que bonito viajar a Bagram”, más dos tripulaciones completas, incluido equipo médico. Todo ello al final para no salir de la Base de Bagram (Afganistán), porque no estaba el horno para bollos. Y claro representación de la maravillosa ONG que organiza unos talleres para mujeres afganas en riesgo de exclusión (que bonito “riesgo de exclusión” en Afganistán, no me río porque es patético), pues nada de nada.
El viaje costó, según mis cálculos, más dinero del invertido en las mujeres en “riesgo de exclusión”, y advierto tengo fotos del viaje y son muy ilustrativas… Pero sigamos, ni esa señora, ni ningún otro político democrático de España o de Islandia, por poner un ejemplo cualquiera, se ha preocupado lo más mínimo de la realidad en Afganistán, en Iraq o en donde sea. Es solo una cuestión de votos. Y en esta ocasión, la retirada les ha cogido a todos por sorpresa, ya que estaban todos, los de todos partidos con el pie cambiado, por lo que casi ninguno va a poder aprovechar el tirón. Genial.
En fin que Gervasio ha dicho también otras cosas interesantes: Como que cuando se entra allí ya se sabía que no se iba a poder solucionar nada, que lo único que se ha hecho es dar dinero a manos llenas a “los señores de la guerra”, algo realmente productivo porque han facilitado el negocio de la construcción y creado puestos de trabajo, eso sí en la construcción de unos palacios que no veas.
También habló de que la mayoría de los representantes democráticos, en unas elecciones democráticas, pero al estilo afgano, es decir, la democracia ese día estaba de vacaciones, eran en su mayoría auténticos genocidios, incluso citó varios nombres concretos. Yo personalmente conozco a dos y tela con los dos que cito, pero al “amigo americano” y a los políticos europeos no les importaba lo más mínimo. En realidad no es que no les importara, simplemente no habían puesto los pies allí, salvo para hacer turismo.
Por último, ustedes dirán: ¿y para qué están los servicios de información?. Ojo al dato, porque para que entiendan que es un servicio secreto me retrotraigo a la Segunda Guerra Mundial:
Pues les informo de que: el 9 de abril de 1945, un mes antes de la rendición alemana, murió ajusticiado en el Campo de de concentración de Flossenbürg el almirante Wilhelm Franz Canaris, que había sido el jefe de los Servicios Secretos de Alemania. Mario porque él mismo definió con una frase lo que ustedes se preguntan:…//… Los Servicios Secretos no tienen porque tener los mismos intereses que su País; Aunque a veces, y muy raramente, los tengan…//…
José Antonio Ruiz de la Hermosa
