Victoria Rosel, delegada de Violencia de Género, da cobertura a personajes violentos

La podemita la toma con Carla Toscano y la bloquea en Twitter.

Pablo Iglesias ha vuelto y lo ha hecho con un artículo, al cual le acompañaba la ilustración de una “pistola nazi” en la que aparecen grabados los logos de PP y Vox. ¿Qué justificación hay para tal salvajada? Pues que anuncia su reflexión sobre los peligros de un gobierno de PP y Vox. Si esto fuera cierto, quiere denunciar la violencia con más violencia. Pero la realidad es que el amigo de etarras nos quiere dar lecciones de moralidad. Un señor que ha disculpado los crímenes del Comunismo en todo el mundo.

Hay dos cosas lamentables en este asunto. Bueno, tres pero la tercera os la comento más tarde. La primera es que relaciona a Vox y al PP con el nazismo cuando ambos partidos condenan el Holocausto. De hecho, Vox ha promovido mociones de condena del Holocausto en todos los consistorios donde tiene representación, coincidiendo con el 75 aniversario de la liberación del campo de concentración de Auschwitz y la conmemoración del Día Europeo de la Memoria del Holocausto. La segunda, demonizando al adversario e incitando a la violencia. Él, Pablo Iglesias.

Suponemos que no tiene otra cosa en la cabeza más que, quizás, sentimientos de venganza por su forzosa “retirada” de la política. Al menos, la política aparente. Ahora se valdrá de determinados “medios de comunicación” para intentar influir en la sociedad contra los que él seguramente piensa que lo echaron de la política cuando ha sido precisamente el pueblo español el que le ha puesto la puntera en su trasero por sus malas acciones.

Pablo Iglesias, el experto en violencia:

Pablo Iglesias, el experto en violencia:

En dicho texto, nombra varios riesgos serios, para él, como que se ilegalicen partidos, pues dice que “la ilegalización de partidos ya es conocida en nuestro Estado” cuando él ha propuesto ilegalizar a Vox y justo, se podría decir que el propio artículo es un autozasca de campeonato dado que justifica esa necesidad para con Vox y el PP. Cuando los únicos partidos que se deberían ilegalizar son los afines a él compuestos por etarras y golpistas.
El tercer asunto de gravedad, es que teniendo cuentas pendientes con el pueblo español y venezolano, se atreva a dar lecciones de moral y democracia. Suponemos que todo ello lo ha aprendido de su amigo Otegi.
Explicado todo lo anterior, voy a añadir un cuarto asunto. La cobertura que ha tenido este individuo de coleta cortada, el Sansón de Galapagar, por parte de la Delegada del Gobierno contra la violencia de género. Una señora que se ha dedicado en estos últimos días, a bloquear a una Diputada Nacional de Vox, Carla Toscano, porque no le gustan las críticas ni admite la posibilidad de cambio por el bien de la igualdad real:

Me pregunto, ¿hasta qué punto es legal que una Delegada del Gobierno, bloquee a una Diputada del Parlamento cuando usa ese canal para informar de sus “actividades”?
Una Delegada contra la violencia dando cobertura a la violencia. Una señora que se supone que cobra para luchar contra una plaga, esparciendo las semillas para que crezcan brotes violentos. Se olvida la señora María Victoria Rosell Aguilar, que en Vox y el PP, hay muchas mujeres, dado que los hombres le importa un soberano pepino.


https://twitter.com/VickyRosell/status/1434502151762481152?s=19


Seguramente, comparte la idea de Pablo Iglesias: “La condición de posibilidad de ascenso de la derecha y ultraderecha ha sido el españolismo más reaccionario y esa misma sería la condición de posibilidad de su permanencia en el poder”. Es decir, de los españoles a sentirse eso, españoles. Sentir el orgullo de serlo y la necesidad de defender a su país porque lo merece. Como decía Camilo José Cela, no porque sea el mejor, sino porque se merece todo el respeto del mundo. Ésa es la diferencia entre el nacionalismo de sus amigos, los que sí portaban armas y las usaban para ejercer la fuerza y obtener sus beneficios y el patriotismo, al menos de Vox. Dado que el PP, se suele esconder con demasiada frecuencia y cuando muestra el orgullo lo hace porque Vox asoma. ¿Por qué Pablo Iglesias no muestra las armas que han usado otros para sembrar el terror en las calles españolas?
Vergüenza de Delegada contra la violencia de género haciendo cobertura de esa aberración, promoviendo más violencia de un individuo que, siendo vicepresidente, se “enfrentó” a una investigación en el Tribunal Supremo por presuntos delitos de daños y revelación de secretos por el caso del supuesto robo del móvil de su exasesora en el Parlamento Europeo, Dina Bousselham. Cuando precisamente, el juez vio agravantes de género en los delitos que se le imputaban a Pablo Iglesias. Vergüenza. Aunque ya sabemos que las Políticas de Género no valen para nada positivo y más con estas demostraciones vergonzosas por parte de la Delegada.
Para esto ha quedado la Delegada, para dar cobertura a personajes violentos.

Leticia Barcia

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