El socialcomunismo valenciano, con Joan Ribó en la cabeza, volverá a contar este año con sus polémicas «Reinas Magas Republicanas», para recorrer las calles de la ciudad en la tradicional cabalgata en la fiesta de la infancia. Un polémico cambio en la histórica celebración cristianas, que siempre se ha hecho con tres Reyes Magos, Baltasar, Melchor y Gaspar.
La fiesta protagonizada por las Magas de Enero tiene como objetivo, rescatar el espíritu de la «Fiesta de la Niñez» que se celebraba bajo el gobierno de la República en 1937. Los organizadores defienden su octava edición asegurando que su cabalgata «nació en medio de la contienda y buscó alegrar a los niños, además de sustituir la cabalgata de los Reyes Magos, por tratarse de una fiesta religiosa, que el gobierno republicano prohibió».
A pesar de las duras críticas, tanto de una gran parte de la ciudadanía como de los partidos de la oposición que acusan a Ribó de «imponer su ideología», el comunista no parece tener la intención de dar marcha atrás y hacer una cabalgata que se ajuste a la tradición. “Sigue imponiendo fiestas que nunca han tenido arraigo en la ciudad y de esta forma justificar que se sigan pagando actos de apoyo a la República”, denuncian.
