Cuarta madrugada muy intensa en Melilla en tan sólo una semana y con varios Guardias Civiles mal heridos, tras un nuevo intento multitudinario de subsaharanos de entrar en Europa, asaltando la valla que separa España, de Marruecos. Con «palos, piedras y garfios muy afilados», los inmigrantes ilegales, han dejado a 13 agentes encargados de la protección de la frontera, heridos de gravedad.

El asalto, muy bien planificado y organizado, se ha producido sobre las cuatro de esta madrugada  en la zona del Barrio Chino y ha estado protagonizado por más de 500 inmigrantes, en su mayoría procedentes de Senegal aunque habían también otras nacionalidades, según fuentes de la delegación del Gobierno. La misma delegación que ha denunciado «la violencia extrema», empleada por los inmigrantes.